FRANCESC CASADESUS MERCAT DE LES FLORS

Con Francesc Casadesús en El Mercat de les Flors

Barcelonés entusiasta, amante de la danza y la creación. Icono en el mundo de la gestión cultural. Premio Nacional de Cultura 2008, y recientemente galardonado por el Ministerio de Cultura Francés con l´Ordre des Arts et des Lettres en el grado Chevalier.  Francesc Casadesús está al frente de la dirección del Mercat de les Flors,  el «hogar» del arte y el movimiento»,  desde 2005. Un espacio donde público, espectadores, artistas, staff y curiosos comparten su disfrute y pasión por la danza.

Fui a verle un lunes por la tarde, y  en el vestíbulo del  Mercat de les Flors se respiraba aire de fiesta y ajetreo. Semana de estreno «La joya de la Temporada» (como lo había descrito meses antes Francesc en la Presentación de Temporada). En pocos días  Lo Real-Le Reél-The Real el impactante espectáculo de Israel Galván sobre el genocidio de los gitanos en Europa Nazi pisaría y estrenaría el nuevo escenario Pina Bausch. Esta es la entrevista:

Generamos lenguajes a partir del cuerpo pero sin límites determinados

P: Francesc, cuando te hiciste cargo de la dirección del Mercat de les Flors, uno de tus objetivos era que el Mercat dejase de ser un teatro para convertirse en un centro de arte y movimiento ¿Qué se mueve en el Mercat?

R: La idea de movimiento iba dirigida a que fuese menos un espacio de exhibición y más un espacio donde «se cocinasen cosas». Otro tipo de relación con los artistas y el público. Lo que se traduce en algo que para mi tiene mucho que ver con el espríritu original del Mercat; que es un espacio para la creatividad en el que ha veces fuera difícil ponerle fronteras. El lenguaje principal para mi parte del cuerpo y el movimiento, porque es un lenguaje que permite mucha libertad creativa, y por tanto te da una identidad. Generamos lenguajes a partir del cuerpo, pero sin límites determinados, por lo que las estéticas que se mueven aquí también pueden ser muy variadas,  y muy ligadas a la creación actual.

Lo que ha sucedido también es que el edificio se ha ido transformando con el proyecto; hemos conseguido una estructura más flexible, con espacio para los artistas, salas de ensayo: crear aquí dentro… Lo que nos ha llevado a poder adquirir un compromiso para las producciones que va más allá de una invitación a venir al Mercat, sino que se convierte en una relación personal con el artista.

Todo esto hace que al final la programación termine siendo un reflejo de todo el trabajo que se está haciendo detrás. Si presentamos un artista, creo que es bonito que se mantenga una continuidad, pueda venir, presentar proyectos, hacer propuestas, ensayar aquí… Hay grados de colaboración distinta y de aquí nace la programación.

PROGRAMACIÓN y PÚBLICOS

La gente de danza es muy omnívora, quiere ir viendo y conociendo «hacerse su propio menú»

P: En la programación del Mercat de les Flors hay propuestas paralelas: El més petit de tots, Secció Irregular, Ciutat Flamenco, Festival Butoh Barcelona, Apropa Cultura… ¿Queréis captar nuevos públicos?

R: La creación de estas cápsulas o formatos corresponde a dos razones. Una es de especifidad. Hay públicos que piden programaciones específicas y vemos que en si mismas son muy ricas y merece la pena entretenerse y detenerse. Por ejemplo el público de flamenco. Es interesante poder hacer un Festival de Flamenco porque pasan cosas y a veces con una compañía no es suficiente. En ocasiones en un festival se crean sinérgias de un estilo de danza determinado, que hace que esto explote hacia sitios distintos. Hay una intención de provocación.

También cuando hay programas con ciclos determinados la gente se despista menos. Por ejemplo en la Sección Irregular está dedicada a la danza experimental por lo que el público que viene ya sabe lo que va a ver. Es más una acción de comunicación. Para que la gente no se confunda y para que la programación no sea tan plana, sino que haya unos colores, unas texturas. Uno sabe ya que Secció Irregular es experimental, que El més petit de Tots es para bebés, que la Danza Butoh viene de Japón…

Todo esto también ha surgido a partir de escuchar qué estaba pasando en la ciudad. Hay ideas nuestras, y otras nacen de colaboraciones con el público privado. Por ejemplo El Festival Buthoh es u festival que pasa  en Barcelona, en galerias de arte y nace de una asociación privada. Nos proponen este Festival y el Mercat crece. Lo mismo pasó con Els més petits de tots, el Festival nació en Sabadell, lo acogimos en el Mercat, cogió visibilidad y ahora se hace en ocho ciudades.

La Secció Irregular también viene de «escuchar» a la ciudad, aunque buscábamos un proyecto cuyo desarrollo fuese conjunto con museos o galerías de arte. Y, como es una sección muy específica funcionamos a través de un comisionariado que tiene una mirada mucho más atenta, para poder llegar más a fondo en terrenos distintos.

Has mencionado algunos, pero también tenemos el Festival IDN danza y nuevos medios, cuya celebración es bianual. Aquí también delegamos en un comisario externo que se dedica a buscar espectáculos de danza con videos u otro trabajo tecnológico. Son distintas  lineas artísticas ¿si detrás hay una estrategia de público? Probablemente también pero principalmente nacen de reflexionar una realidad que está ocurriendo. La gente de danza es muy omnivora. quiere ir viendo y conociendo. Hacerse su propio menú.

ARTISTAS RESIDENTES, ARTISTAS ASOCIADOS y CO-PRODUCCIONES

Háblame de los artistas residentes, artistas asociados y las co-producciones en las que participa el Mercat de les Flors.

R: Las residencias son cesiones de espacio de un máximo de tres meses. Pueden trabajar en el Mercat o en el Graner —el espacio de creación gestionado por el Mercat—, y en residencia podemos tener artistas que no han tenido antes un contacto con el Mercat, o a artistas asociados. El artista asociado es un artista con el que producimos y  trabajamos juntos por un periodo de tres o cuatro años. Por ejemplo con Israel Galván, Baró D´Evel, Roberto Olivan y Mal Pelo hacemos co-producciones internacionales con un mínimo de tres teatros. Necesitamos tener referentes y las producciones internacionales son ayudas especiales para crear un espectáculo. En este caso el artista puede ser  asociado, o no. A veces es el primer paso para convertirse en asociado.

P: En estos momentos tenéis en residencia Israel Galván y Akram Khan. Dos grandes de la danza gestando su nueva creación —TOROBAKA—. El mundo de la danza con los ojos puestos en el Mercat ¿Cómo  te sientes?

R: Creo que es el resultado de que nuestras políticas de proximidad con los artistas funciona. Los procesos de creación a veces son complicados. El artista tiene que tener confianza, estar seguro de que en el espacio donde va a estar le van a dar todas las facilidades que vayan surgiendo en el proceso. Tienen que sentirse cómodos. En este caso es fruto de la relación que se ha creado con el artista, casi como de familia. Estamos muy contentos de tener a Israel y Akram en el Graner, son ellos los que han escogido venir, y por supuesto es mu bonito tenerles aquí.

TALLER del ESPECTADOR

P: Por último, háblame de la nueva propuesta para el espectador El Taller del Espectador ¿Tiene algo que ver aquí el libro del Espectador Emancipado de Jacques Ranciére?

R: Si, la idea del Taller del Espectador viene dada por la necesidad de dar al público las herramientas para que sea independiente, elabore sus propios criterios y conozca todo lo que se cocina en el mundo de la danza. Es un programa muy completo y extenso, que engloba desde la  visita a espacios de creación, encuentros con los artistas y talleres de movimiento impartidos por algunos de los artistas que están en la programación.

Una llamada nos avisa que se agotó el tiempo. Hace media hora que lo están esperando. A Francesc habla con pasión de danza, y a mi me apasiona escucharle. Le doy las gracias y bajo andando las escaleras de este edificio emblemático de la Ciudad Condal, que inició su despegue imparable hace casi una década con  Peter Brook y La Tragedia de Carmen, y cerró temporada con un 83% de ocupación a pesar de estar bajo mínimos presupuestarios.

En el Mercat de les Flors se vive la magia.